El poder de las ideas

El poder de las ideas

«Las ideas no son responsables de lo que los hombres hagan de ellas»

W. Heisenberg

*PODEROSAS IDEAS. Querría iniciar nuestra reflexión ilustrándola con un momento cinematográfico que ayude a ponernos más en situación. En Inception (Origen), película del visionario Chris Nolan, en la parte introductoria, Cobb (Leo DiCaprio), un ladrón de ideas, acompañado por su ayudante Arthur (Joseph Gordon-Levitt), le explica a Saito (Ken Watanabe), una de sus pretendidas víctimas, lo que suponga una idea. Cobb le pregunta «¿cuál es el parásito más resistente?… ¿una bacteria… un virus… una lombriz intestinal?»; ante una cierta expresión de perplejidad por parte de Saito, Arthur se prepara para dar la respuesta explicativa, y comenta «lo que el señor Cobb intenta decir…», pero antes de que pueda extenderse, Cobb se adelanta de modo terminante, y responde «una idea», y añade «resistente, altamente contagiosa; una vez que se ha apoderado del cerebro es prácticamente imposible erradicarla; una idea totalmente formada y entendida se queda ahí aferrada». No sé hasta qué punto pudo influir esa película en mis ideas (es de 2010), o si Nolan había leído algo mío (ironía), pero el caso es que coincidimos bastante en el planteamiento al respecto de las poderosas y condicionantes ideas, y que en mi investigación caracterizo con el concepto de condicionaje discursivo.

Seguir leyendo «El poder de las ideas»

A propósito de mi tesis: epistemes, paradigmas y patronajes

«Es difícil, al leer los análisis de Foucault sobre las episteme que distingue sucesivamente, no pensar en los paradigmas descritos por Th. S. Kuhn en su célebre obra sobre las revoluciones científicas»

J. Piaget, El Estructuralismo

*De la EPISTEMOLOGÍA a la EPISTEMESLOGÍA. En el s.XX, dos autores, Michel Foucault y Thomas S. Kuhn, llevaron a cabo estudios sobre el discurso científico, el primero a propósito de aquel de las ciencias socio-humanas, el segundo sobre el de las ciencias naturales. En la perspectiva digamos que tradicional, los pensadores que hablaban del conocimiento lo hacían como si aquellas ideas (y metodología) de colegas previos estuviesen equivocadas o adoleciesen de insuficiencias (Descartes, Locke, Hume, Kant), de tal modo que se hacía epistemología. Tanto Foucault como Kuhn, desarrollaron la idea de que ese sea un debate estéril, pues cabrían diferentes maneras de investigar/conocer, y no está claro que, entre ellas, una sea mejor que la otra: pasaríamos a hacer una especie de epistemeslogía, o estudio, no del conocimiento, sino de las diferentes maneras de conocimiento.

Seguir leyendo «A propósito de mi tesis: epistemes, paradigmas y patronajes»